Según estimaciones de la consultora inmobiliaria Cushman & Wakefield, estos espacios podrían crecer aproximadamente 1,5% para 2020
Para 2022 se estima que habrá 5,1 millones de personas que utilizarán oficinas de trabajo colaborativas en el mundo, lo que implicaría un crecimiento anual de 24,2%, según la Encuesta Global de Coworking 2018 de Deskmag, revista especializada en el tema.
Esta firma además señala que el número de este tipo de espacios ha crecido globalmente, pasando de 1.130 en 2011 a 13.800 en 2017.
De esta tendencia, Colombia no ha sido ajena. De acuerdo con Juan Carlos Delgado, country manager de Cushman & Wakefield, se estima que a diciembre de este año en Bogotá hay 1’691.739 metros cuadrados (m2) de oficinas tipo A, de las cuales 5% son ocupadas por grandes firmas de ‘coworking’ (77.894 m2).
El directivo además dice que dicho dato seguirá creciendo en Bogotá, y aunque en gran parte dependerá de la demanda, su variación podría llegar a ser de 1,5%.
Según la consultora inmobiliaria en mención, los edificios Clase A (A+ y A) son inmuebles que cuentan con altas especificaciones técnicas y de seguridad, con antigüedad de entre cero y diez años, plantas de 1.000 m2 a 1.500 m2, de entre una y cuatro oficinas por piso y alcanzan alturas hasta de 2,70 metros.
Además, son poseedores o están en proceso de certificaciones de sostenibilidad y ambiental como Leed o Aqua, y están ubicados estratégicamente en zonas con facilidad de acceso.
IMPACTO EN EL MERCADO
En el histórico de los últimos cinco años, y con la llegada de grandes firmas de ‘coworking’ a Bogotá, se ha observado un descenso en los niveles de vacancia (disponibilidad) en los edificios premium.
Datos de Cushman & Wakefield indican que en 2015 había una vacancia promedio de 12% y en 2017 dada la desaceleración de la economía, esta se elevó a 14%. Mientras que en 2018 esta cerró cercana al 10%, en el tercer trimestre de este año, “vemos como gracias en parte a la ocupación de los ‘coworking’, quienes hoy ocupan varios edificios completos Clase A, la vacancia alcanza únicamente 7,6%”.
No obstante, en 2019 el mercado vio una recuperación en el precio, en parte debido al alza en la demanda y al mejor desempeño de la economía.
En línea con lo anterior, la consultora indica que debido a que el modelo de ‘coworking’ o espacios colaborativos, se ha ayudado a tener una vacancia óptima en los arrendamientos de edificios tipo A, al ocupar una cantidad importante de metros cuadrados.
“El precio de arriendo de las oficinas ha tenido un incremento desde 2018 (aproximadamente $6.500 por m2), por lo cual el impacto de este modelo en nuestro país ha sido positivo”.
A REINVENTARSE
Para Andrea Duque, gerente Investigación de Mercados de Cushman & Wakefield, el negocio de ‘coworking’ ha impulsado a los propietarios de los edificios a reconsiderar su modelo.
Lo anterior, “debido a que hay ahora una nueva forma de dar valor a los inmuebles, que les permite bajar el riesgo, dado a que los clientes ocupan los espacios en su totalidad, reduciendo la posibilidad de que el activo quede vacío, lo cual incrementa la rentabilidad y el valor del mismo”.
Por su parte, Rafael Álvarez, presidente de IC Constructora, aseguró que han visto que la dinámica del mercado colombiano en términos generales se ha movido con la absorción de espacios donde la participación de los operadores de ‘coworking’ y oficinas flexibles han sido relevante.
Fuente: Portafolio
